Los relojes mecánicos funcionan a partir de la energía que crea su complejo sistema mecánico de resortes y engranajes. Algunas de las piezas que destacan en este tipo de relojes son la rueda de equilibrio, el tren de engranajes, el escape o el tourbillon.
Sobre esta última pieza, una de las más complejas, hablaremos en este artículo. Descubre qué es el tourbillon y cuál es su funcionamiento.
¿Qué es un tourbillon?
La palabra tourbillon viene del francés y se podría traducir como «torbellino». Sin embargo, poco o nada tiene que ver esta denominación con la función que realiza dentro de la mecánica del reloj.
El tourbillon de un reloj es el mecanismo a través del que se consigue alcanzar la mejor precisión y exactitud en los modelos mecánicos. Se trata de un compartimento, del tamaño de una moneda de un céntimo, donde conviven la espiral, la rueda de escape, el áncora y el volante.
Este compartimento se une y es impulsado por la rueda del segundero. Se ubica en la esfera y es capaz, en la actualidad, de marcar la diferencia entre un reloj al uso y uno de gran valor.
¿Cómo funciona el tourbillon de un reloj?
El tourbillon fue inventado por el relojero Abraham-Louis Breguet en torno al año 1795. Es decir, en la época de los relojes de bolsillo. Este tipo de relojes contaban con dos posiciones: una vertical, dentro del bolsillo, y una horizontal, cuando estaba sobre la mesa.
Breguet, en aquel entonces, fue quien descubrió que la gravedad era la encargada de empujar los mecanismos internos del reloj. Esto hacía que se crearan imperfecciones. Por este motivo, el relojero decidió ir en contra de la gravedad, creando una caja para sujetar todas las piezas que eran necesarias para que el reloj pudiera dar la hora con precisión. Y así apareció el tourbillon.
El tourbillon es un mecanismo capaz de hacer girar sobre su eje un armazón que tiene forma de jaula. Sobre el mismo, se montan tanto el volante como el escape del reloj.
Para alcanzar la mayor precisión, Brueguet logró que la caja rotara en círculo, evitando que la gravedad terminara tirando del muelle en un solo sentido. En aquel momento, este descubrimiento causó un gran impacto en la relojería.
En 1795, el mismo año de su descubrimiento, fue cuando apareció por primera vez en la historia este curioso invento en los relojes de bolsillo. Sin embargo, fue en 1801 cuando Breguet decidió patentarlo. En el momento de su muerte, había creado 35 relojes con tourbillon.
Dos siglos después, en los años 80, fue cuando auementó su uso y su popularidad. El reloj con tourbillon ya no se usaba por necesidad, pues los relojes de cuarzo consiguieron ser más precisos que los anteriores. Sin embargo, se comenzó a considerar como un símbolo de estatus y los relojes mecánicos que incorporan este sistema suelen tener un gran valor.
El tourbillon en la actualidad
En la actualidad, el tourbillon se trata de un mecanismo muy complicado que se compone de unas 70 piezas. Todas ellas se ubican dentro de un compartimento de pequeño tamaño ubicado, de forma general, en la esfera. Es decir, el lugar donde los mecanismos rotatorios son capaces de captar la atención de cualquiera que esté admirando el reloj.
Con el paso de los años, el invento de Breguet se fue actualizando. En 1920, Alfred Helwig creó el tourbillon volante y, ya en 2004, Jaeger-LeCoultre desarrolló el Gyrotourbillon, que compensa las desviaciones que crea la gravedad tanto en horizontal como en vertical y en diagonal. Se trata de uno de los mecanismos más precisos que existen.
En nuestros días, siguen existiendo relojes con tourbillon aunque este ya no es necesario para el funcionamiento del reloj. Con la llegada de nuevos sistemas, como los especiales para los relojes de pulsera o incluso los desarrollados con las nuevas tecnologías, se podría pensar que el invento de Breguet quedaría en un segundo plano.
Sin embargo, a pesar de no ser necesario, sí se ha convertido en un auténtico objeto de deseo para todos los amantes de la alta relojería. A día de hoy se siguen fabricando diversos modelos con este complejo sistema, como son el Montblanc 4810 Exo tourbillon Slim; el Octo Finissimo tourbillon de Bvulgari o el Panerai Lo Scienziato Luminor 1950 tourbillon GMT Titanio. También lo incoporan en algunos modelos otras marcas muy reconocidas como Tag Heuer o Cartier.
En la actualidad no se hacen relojes con tourbillon para aumentar la precisión. No obstante, sí se hace con el objetivo de crear piezas únicas, de gran belleza y valor, capaces de llamar la atención de los verdaderos amantes de los relojes. Por tanto, el mecanismo desarrollado por Breguet continúa muy presente en nuestros días y, además, sigue marcando la diferencia en la alta relojería.